Pulsaciones.

Pulsaciones

¿Y si hubieras encontrado al amor de tu vida…

      … y lo hubieras olvidado? Los autores relatan la historia de una chica llamada Elia que sufrió un trágico accidente donde lamentablemente entro en un estado de coma y al despertar sufrió una pérdida de memoria a corto plazo con un lapso de tres días anteriores a su accidente. Y al despertar sus padres le obsequiaron un móvil donde instalo la aplicación HeartBits que consta en mandar y recibir mensajes de texto y al final de cada día contabiliza el número de pulsaciones que realiza el usuario en la pantalla del móvil. Después de que Elia instalara la aplicación, rápidamente recibió un mensaje de su mejor amiga Sue, tuvieron una conversación acerca de que Sue no podía creer que ella hubiese reaccionado y también sobre la preocupación que pasó mientras Elia estaba en coma. Posteriormente entablo una plática con su mamá donde ella estaba preocupada por las situaciones en las que se encontraba su hija preguntándole si había pasado el médico en turno y que si había podido recordar algo más por lo que Elia respondió que el médico en turno si había hecho su visita y que no había podido recordar nada. Al cabo de unos minutos todos sus amigos formaron un grupo de bienvenida donde la saludaron y preguntaron por su salud y ella agradeciendo el detalle les mando saludos a todos sus amigos.

         Al día siguiente Elia continuaba conversando con su mejor amiga Sue, por lo que le contaba que había sido un milagro que ella despertara del coma sin secuelas y también que esa tarde empezaban sus terapias en sesiones individuales y en grupo. Por lo que Elia conoció a una chica llamada Marion y que en esa misma tarde conversaron a través de la aplicación

         HeartBeats. Después su mejor amiga Sue le envió un mensaje preguntándole como le había ido en su terapia a lo que Elia respondió que le había parecido bastante agotador y con el apoyo de su amiga Marion lo hace menos tedioso y cansado, por lo que Sue pregunto que qué le había sucedido a ella y Elia contesto: “Provoco un incendio en su casa sin querer, tiene la mitad de la cara quemada la pobre, pero es increíble, se ve tan compuesta, tan alegre, siempre está sonriendo y haciendo bromas” y Sue le respondió que esperaba conocerla pronto. En la madrugada de esa noche Elia le envió otro mensaje a Sue diciéndole que tenía miedo que se desvaneciera el último recuerdo que ella tenía por lo que le aconsejo Sue que se lo contara y si ella llegaba a olvidarlo ella podría recordárselo y Elia le conto que el concierto de Regina Spektor todo mundo le había fallado, pero ese no fue impedimento para que ella fuera, cuando ella casi llevaba hora y media ahí sonó su móvil, era su madre, había olvidado las llaves dentro de casa y que la esperaba en la puerta del teatro, tuvo que salir a darle las de Elia, cuando ella quiso ingresar nuevamente al concierto el de seguridad no la dejo pasar, se quedó frustrada, intentando escuchar algo desde el vestíbulo y entonces una voz a su espalda le dijo: “No te puedo devolver la canción pero puedo mostrarte como danzan los peces” Y que eso había sido su ultimo recuerdo, a lo que Sue intento ser positiva ante la situación tratando de hacerla sentir bien y le respondió que no se preocupara y que juntas podrían solucionar el problema y le aconsejo que fuera a descansar, finalmente Elia le hizo caso y fue a dormir. Más tarde, se conocieron Sue y Marion, asimismo, Marion le envió un mensaje de texto a Elia, diciéndole que le había gustado mucho conocer a Sue y que esperaba salir algún día con ellas, de igual modo Elia le respondió que le encantaba la idea y le pregunto que como le había ido en su sesión, posteriormente Marion le contesto que le había resultado algo difícil, porque estaba su madre, pero al final hubo una reconciliación y Elia respondió que le

         Alegraba que terminara bien la situación a lo que después Marion tuvo que retirarse. Mientras tanto alguien desconocido, un usuario que se pasaba llamar por Phoenix, le envió un mensaje a Elia diciéndole: “Tanto si crees que puedes como si crees que no puedes, tienes razón” por ende, Elia respondió que quien era, a lo que Phoenix no quiso responderle, finalmente Phoenix le dijo a Elia “Suerte con la recuperación” a lo que Elia le entro una preocupación y le pregunto que si la conocía, y Phoenix se desconectó. Al día siguiente, Sue fue a visitar a Elia al hospital por lo que Sue olvido sus auriculares en la habitación, así que, Elia le envió un mensaje a Sue para decirle, empezaron a conversar y por ultimo Sue pregunto sobre aquel chico misterioso, al que le tenía una gran desconfianza y temor que le fuese a pasar algo a Elia, por lo que Elia le respondió que no se preocupara y así llegaron a su despedida. Más tarde Elia no pudo esperar para contarle a Marion que el día viernes la darían de alta, por lo que Marion le contesto que se alegraba mucho por ella y que ahora sí podrían tomar un café fuera del hospital, Elia le dijo que sí pero que tendría que seguir con la terapia, asimismo Elia le pregunto a Marion que cuanto tiempo llevaba asistiendo a las terapias a lo que Marion le respondió que varias semanas así que empezó a contarle toda su historia, le dijo que antes le gustaba pasar tiempo sol, le encantaba regodearse en su miseria y que después de que ocurrió el accidente empezó a ver la vida de otra perspectiva, que tuvo que estar a punto de morir para darse cuenta de que la felicidad estaba en lo que ella tenía y no en lo que le faltaba. Así que después de eso, tuvieron que despedirse a causa de que irían a cenar. Más tarde, Sue le envió un mensaje, contándole todo lo que había pasado en su día, que decía así: “El gringo Tommy ya está en casa, esta noche nos pidió a mi madre y a mí que fuéramos a nuestro restaurante favorito ¡Y ha pagado él! En fin, me voy, acuérdate de pasarme el número de Marion y así, finalmente, concluyo su conversación.

         Al día siguiente Elia le respondió a Sue, le dijo que necesitaban hablar, que era muy importante, a lo que Sue le respondió que estaba ocupando su madre el teléfono, pero que le contara que es lo que había pasado por lo que Elia le contesto: “He recordado un detalle, y creo que es de los días que había olvidado, recordé un gato, un gato saliendo de una manzana, en concreto, a lo mejor eso ni siquiera pertenece a esos días, está claro que es una tontería…” por lo consiguiente Sue le respondió que no se rindiera y que le empezara a describir la imagen, Elia empezó a describirla, le dijo que era una manzana roja, gigante con un agujero en el medio, y en lugar de un gusano, salía un gato, después de que Elia le respondiera eso, Sue y Elia empezaron a investigar. Al día siguiente, sería la última terapia de Elia, por lo que Marion y Elia quedaron de verse para acompañarse, más tarde el usuario desconocido llamado Phoenix, le envió un mensaje de texto a Elia donde la describía tal y como era Elia. Elia empezaba a preocuparse, ya que no tenía idea de la identidad de Phoenix, así que Elia le realizo una serie de preguntas donde le decía lo siguiente: ¿Eres de mi instituto? ¿Me conoces? ¿Te conozco? A lo que Phoenix le respondió: No voy en tu instituto, si te conozco y no exactamente, por lo que Elia le entro la curiosidad de saber más información pero Phoenix, no quiso decirle algo más y así concluyo su conversación.

        Al siguiente día, Marion  le envió un mensaje a Elia, preguntándole como se sentía después de haber llegado a su casa por consiguiente Elia le respondió que bastante bien y que había dormido un poco tarde por estar hablando por teléfono con Sue, Marion le respondió que se alegraba y así sucesivamente empezaron a conversar, Marion le dijo a Elia que si sabía que era lo que más le daba rabia, fue que ella pudo evitar su accidente, si ella hubiese apagado las velas aromáticas antes de ir a dormir, su vida sería normal, por lo que Elia respondió un poco molesta: a mí me gusta cómo eres, y ningún incendio puede hacer arder esa fuerza y bondad que demuestras a diario, Marion, muy emocionada le contesto que la haría llorar y que era una gran amiga.

             Al día siguiente, su mejor amiga Sue le envió un mensaje, diciéndole que había encontrado un programa sobre Newton, en el canal de la ciencia, a lo que Elia no entendía a que trataba de referirse Sue, así que Sue le explico que Newton era un loco de los felinos, y que por lo mismo él tenía una gata que se pasaba todo el día maullando y que no le dejaba trabajar, y que para evitar que su gata estuviera abriendo y cerrando cada dos por tres, Newton invento la gatera. Por lo que Elia le pregunto que qué le había hecho pensar que su recuerdo del gato y la manzana hacía referencia a Newton y Sue respondió que era elemental, y que los sueños no son más que sombras de la realidad y a lo que iba es que ese gato asomando por la manzana estaba relacionado con Newton, por lo que Elia no creyó.

            Al siguiente día, Elia decidió tomar la iniciativa de enviarle un mensaje a Phoenix, por lo que Phoenix se sorprendió y le respondió: ¡Que sorpresa! ¿Cómo es que has decidido a escribirme? Y Elia respondió que absurdamente ella lo echaba de menos, Phoenix le preguntó que porque decía absurdamente a lo que Elia le respondió que era porque ni si quiera lo conocía, no sabía cómo sonaba su voz, pero que se sentía bien charlando con el así que Elia le dijo que porque no quedaban un día y Phoenix se desconectó. Más tarde, Elia decidió mandarle un mensaje a Marion, invitándola a un Karaoke por lo que Marion le respondió que no podría ir, después de eso, Marion y Elia empezaron a charlar sobre a quién echaba de menos Marion, ella respondió que a sus compañeros, pero que había alguien en particular, un chico llamado Alex, un chico de su grupo que al que le gustaba desde hace una par de años, pero que después de lo ocurrido en el accidente se le habían acabado las oportunidades, por lo que Elia le respondió que las oportunidades quizá hayan cambiado, pero que no se habían

         Terminado, Marion le respondió a Elia que a veces le entraban tantas dudas y hasta se planteaba si tenía algún sentido que no acabara todo aquella tarde. Por lo que Elia muy molesta le dijo que ella no pensaba así, que ella era mucho más fuerte que todas esas dudas y que estaba agobiada y tenía miedo, que debía de sacar las fuerzas para no dejarse vencer, a lo que Marion le respondió muy agradecida.

       Después de varios días Elia le envió un mensaje a Sue, donde Elia le contaba toda su historia con Phoenix, por lo que Sue le respondió muy preocupada que porque el sabia tanto de ella sin si quiera conocerse, Elia le respondió que esas cosas no importaban tanto y que su instinto le decía que podría confiar en él. Más tarde Elia y Marion conversaron sobre cómo se habían sentido después de la sesión, y de todo lo que habían hecho, donde tuvieron que ver fotos de cuando ellas eran pequeñas. Elia le dijo a Marion que con cualquier estilo se veía estupenda, por lo que Marion le respondió que estaba estupenda, pero que tenían que ser realistas, se había quedado sin media cara, por lo tanto, Elia le dijo que ella había ganado madurez, fuerza de voluntad e incluso sentido del humor y que se había convertido en una chica muy valiente, después de esto, Marion le pregunto que si había servido de algo la terapia, es decir, que si le habían ayudado los recuerdos, por lo que Elia respondio que no, que por muchas fotos que mirara y remirara ninguna le dio pistas sobre los tres días que le faltaban, finalmente tuvieron que despedirse.

        Al día siguiente Sue le mandó un mensaje a Elia diciéndole que habia acabado de descubrir el café Newton, y que su logo era un gato saliendo de la manzana, por lo que Elia creía que había recordado algo, una imagen borrosa de una mesa y que ella aseguraba que se trataba de una cafetería, y que podría ser que se tratara de esa y que estaba sentada con alguien, por lo que Sue le sugirió que ella fuera al café para ver si la reconocían o si le traía algún otro

      Recuerdo, finalmente Elia decidió hacerle caso. Esa misma noche Elia recibió un mensaje de Phoenix, que le decía “Éramos dos desconocidos que se conocían muy bien” y lo que Phoenix le dijo es que esa frase le había recordado a ellos dos, Elia le respondió que ella no era una total desconocida para él, y que ella sólo necesitaba una foto para conocer al chico que había detrás de esos mensajes, después de todo, Phoenix le dijo que no serviría de nada una foto de él ya que no reflejaría de ninguna manera lo que él sentía o como pensaba, finalmente, Phoenix decidió preguntarle cómo iba el día de Elia, a lo que ella respondió que un tanto extraño por lo que le había contado Sue.

       Al siguiente día Elia le mando un mensaje a Marion, pidiéndole un consejo sobre su situación con Phoenix, por lo que al igual que Sue, le causo desconfianza Phoenix, por lo que Elia se enfadó con Marion. Más tarde, Phoenix le envió un mensaje a Elia, saludándola y preguntándole si podía hablar, Elia muy cortante le respondió que depende, así que Phoenix noto el cambio en Elia por lo que le pregunto si ella estaba bien, ella le respondió que sí pero que había estado pensando, que por mucho que se esforzará, necesitaba que ellos se vieran cara a cara, que ella no podía aferrarse a una relación que solo existía a través del celular, finalmente Elia decidió bloquear a Phoenix. Más tarde, Elia decidió ir al café Newton, y desde ahí le envió un mensaje a Sue, diciéndole que el sitio le sonaba, y que creía que se había sentado en la misma mesa que la otra vez pero que no había conseguido recordar nada, después de esto, le conto, que había decidido bloquear a Phoenix. Más tarde, Elia volvió a mandarle un mensaje a Sue, informándole que se iría de vacaciones con sus padres, Sue le sugirió que aprovechara para desconectarse y aclarar sus ideas después de todo.

         Al siguiente día, Tommy le mando un mensaje a Elia preguntándole como le iba en sus vacaciones, Elia le respondió que le iba muy bien, después, siguieron platicando y Tommy le confeso que a él le gustaba Sue, pero que tenía miedo como reaccionara ella, así que Elia le aconsejo que se dejara llevar por lo que el sentía, y él le respondió muy agradecido. Más tarde Elia decidió marcarle a Sue por lo que ella no le respondió, pero después, le envió un mensaje diciéndole que había recordado muchas cosas de golpe, Sue, muy sorprendida le pregunto que como había pasado eso, Elia le respondió que con una infusión de té chai, eso había sido lo que había tomado en el Newton, la frase “No te puedo devolver la canción pero puedo mostrarte como danzan los pies” eso se lo había dicho “Marcos”, era un chico que trabajaba en el guardarropa del concierto de Regina Spektor, después del concierto, ellos dos habían quedado de ir a tomar algo y quedaron un par de veces más, Sue le pregunto que si le gustaba o solo eran amigos, por lo que Elia le respondió que le gustaba, empezó a describirlo físicamente, Sue le pregunto que si habían intercambiado número de celular, Eli le dijo que si, que había intentado marcarle pero que le decía que el número había sido dado de baja, por lo que Sue le pregunto que si él no se había puesto en contacto con ella, y ella le dijo que no que le parecía muy extraño, por lo que Sue empezó a dudar de Phoenix, después Elia empezó a recordar que ella no iba en ningún taxi cuando sufrió el accidente, que ella estaba en el carro con Marcos, él era quien conducía, Elia muy preocupada y exaltada le pregunto a Sue que si le había pasado algo y Sue le aconsejo que se calmara y que se desconectara y fuera con sus papás para que les contará la verdad. Más tarde, Elia decidió desbloquear a Phoenix y empezó a contarle todo lo que había descubierto junto con Sue, le dijo que gracias a la infusión de té chai le habían venido los recuerdos de golpe, pero sobretodo de un chico llamado Marcos, y que irían Aquasort pero que nunca llegaron porque en el camino había

       Empezado a llover, Marcos le dijo “No te preocupes de la tormenta que bajo el agua no llueve” y que en ese momento un coche se les había echado encima y que ese había su último recuerdo, así que Phoenix le preguntó a Elia que si no sabía algo de Marcos y Elia le dijo que no sabía nada de él, que había estado intentando localizarlo pero no lo encuentra y que tampoco entendía porque él no se ponía en contacto con ella, así que Elia le pidió ayuda a Phoenix, y le dijo que: ella no lo recordaba a causa del accidente, y que cual era su excusa para haber desaparecido de la vida de Elia  y que le dijera que al menos en donde estaba, después de todo, Phoenix no quiso decirle nada.

     Pasaron varios días y Elia le envió un mensaje a Sue diciéndole que había olvidado por completo el Aquasort, y que Marcos le había dicho que ahí trabajaba su tío, así que ella supuso que tenía que saber de su sobrino, así que le dijo que iría por la mañana, que si la podía acompañar, Sue le respondió que no podría, ya que tenía que salir con su mamá, así que Elia le pidió ayuda a Tommy, y Tommy por supuesto acepto. Al siguiente día, Sue, la mamá de Elia, su papá de Elia, y Marion le desearon buena suerte y muchos ánimos, que eso motivo aún más a Elia. Llegando a Aquasort, Elia le envió un mensaje a Marcos diciéndole que estaba ahí con él, y que solo le pidiera que lo abrazara, así que Phoenix le pidió que no lo hiciera, y Elia le contesto: “Pues ya es tarde Marcos, porque yo también te quiero. Si he llegado hasta aquí, si he movido cielo, mar y tierra para encontrarte, si te he aceptado como fantasma, si me he vuelto a enamorar de ti en una pantalla de 5x9 ¿Cómo no voy a ser capaz de amarte en una silla de ruedas?”

Referencia bibliografica:  Ruescas, J. y Miralles, F. (2013). Pulsaciones. Boadilla del Monte, Madrid: Ediciones SM.

    Comentario: Sin duda alguna, es una novela del momento que retrata bastante bien el mundo en el que se mueven los jóvenes. No me he encontrado con una novela de narrativa convencional, ni mucho menos, porque impriman los mensajes, que es el modo habitual en que ahora nos comunicamos. Ya he leído alguna novela con formato similar y tampoco me desagradó porque se hace amena.

       Los personajes me han parecido interesantes, he conseguido tenerlos casi a mi lado, he conectado con ellos, puede que porque me han parecido personas normales, de las que una conoce a diario, porque no son héroes ni heroínas sino simples personas.


Fátima Granados Robles. #17 2 F